La oración es una forma de conectar y comprometerse con Dios. Cuando le llevamos nuestras necesidades, incertidumbres, dolores, preocupaciones, agradecimientos o cualquier cosa que la vida nos haya puesto delante, podemos estar seguros de que nos escucha.
“En esto está la confianza que tenemos en él: en que si le pedimos algo según su voluntad, nos escucha” (1Juan 5:14).
También podemos tener la confianza de que quiere aliviar nuestras angustias y tomar nuestras preocupaciones sobre sus hombros.
«Vengan a mí todos los que están fatigados y agobiados, y yo les daré alivio. Tomen mi yugo sobre ustedes, y aprendan de mí, que soy manso y humilde de corazón, y encontrarán descanso, porque mi yugo es suave y mi carga ligera.» (Mateo 11:28-30).
Por favor, envíe su petición de oración utilizando el siguiente formulario y será enviada a nuestras Comunidades Carmelitas para que recen por sus intenciones. Las peticiones de oración se pueden hacer con respecto a cualquier situación - nada es demasiado pequeño o demasiado grande para Dios.